La que se avecina

Parece mentira que cuando mejor podían ir las cosas, todo parezca que se viene abajo. La situación en los alrededores del Ayuntamiento están alborotados. Todo el que da su opinión, de dentro y de fuera, habla de caos. Las cosas no funcionan. Y acaban de ganar por supergoleada dos elecciones, las municipales y las generales y autonómicas. Anda que si llegan a bajar....

Hay un Alcalde que no lo hay. Aun no es senador y ya no se le ve el pelo. Aparece poco y, segun dicen, cada vez que aparece está cabreado, chillón y nervioso.

Entre los concejales son cada vez más los que ni se hablan. Los celos, los roces, los codazos están a la orden del día. Algunos concejales y concejalas ni aparecen para no pelear. de otros y otras ni están ni se les espera.

La crisis de los técnicos superestrellas fichados a golpe de talonario por Il Senatore se derrumba, y algunos incluso hablan de ceses y reestructuraciones.

Del PGOU, estrella de los últimos cuatro años y tarea pendiente de los trece que lleve Limones, ya no se habla, ya no se debate, ya no hay Mesas, y los momentos que vienen son malos. A ver quien hace ahora las miles de viviendas que esperaba algún concejal y promotor frotándose las manos.

Del presupuesto de 2008, y ya estamos en abril, paracen que siguen las consultas con las entidades que dijo la Portavoz, Sra. Ballesteros, que se iniciaban en marzo. O sea, que no lo cuadran ni muertos, porque otra explicación no hay en un ayuntamiento con mayoría absoluta y los mismos concejales de años anteriores y que no puede aprobarlos en su fecha, ni con cuatro meses de retraso.

Y lo inquietante es que todos dicen que esto puede empeorar. Que no hay fuelle para tirar del carro. Que falta liderazgo, presencia, propuestas.

Que Dios o el Arquitecto del Universo nos coja confesados.