Algo huele mal en Alcalá

Y esta vez no es el río Guadaíra. Bueno, también. Pero no nos referimos a eso. A algo peor.

Dicen los politólogos que para que la corrupción se instale en un sistema político, hacen faltas algunas condiciones previas. Primera, que haya un regimén de mayorías absolutas ( o autarquías), pues en éstas la falta de control hace que se relajen las normas y los procedimientos y se hace facil lo que se llama "meter la cuchara".

Segunda, que esta situación de control absoluto se prolongue en el tiempo, pues es necesario que los posibles "corruptibles" tengan la seguridad y el conocimiento que da la experiencia, así como adquirir los malos hábitos.

Y en tercer lugar, que haya un florecimiento de los sectores económicos, pues como en cada transacción, alguien da y alguien recibe. En época de recesión económica no hay corrupción, claro, nadie puede pagar. Si la construcción esta ralentizada, o si las obras públicas no son abundantes -que son las dos principales fuentes de corrupción, como vemos a diario en la prensa- no hay quien quiera comprar "favores".

Pues bien, estas condiciones previas, que son necesarias pero no suficientes, empiezan a darse en nuestra Alcalá querida.

Hay un cuarto factor, más bien subjetivo. Lo que se llama la "rumorología". Y cada vez son más las voces -eso sí, en voz muy baja- que dicen que en Alcalá pasa de todo, vamos, que hay quien se lo lleva "calentito". Desde unas cervecitas en Eroski ayer tarde hasta el partido hoy del Alcalá y el Sevilla B - un empate valioso para los nuestros-, varias personas nos han hecho comentarios en este sentido.

Sabemos que este tema es muy complejo. Tenemos claro que el anonimato del que disfrutamos es un enorme espacio de libertad, pero no un reducto de impunidad. Por eso queremos ser responsables, aunque no complices.

Pero la realidad es que hoy se comenta que en Ideal, lo de Alcalá 10, entre "coletazos" y "Lambertazos" se mueve mucho dinero. Que el concejal de Obras y Servicios Urbanos, entre cochazo de superlujo y comidas con contratistas consume sus días. Que en Urbanismo y el futuro Plan, con gente que conocía de antemano las recalificaciones y ha comprado, se dan más "pelotazos" que en el campo del Mosquito. Que el concejal de Fiestas Mayores, entre feria, flamenco y "manos largas" tampoco para. Que el Alcalde y sus comiditas y fiestas en grandes fincas de promotores no es ajeno. Que el lío de la Sociedad de la Comunicación es cada vez mayor, como empieza a detectar el PA y los casi 700.000 euros del último Pleno. Que.........

Bueno, de todo eso se habla. No nos corresponde a los ciudadanos comprobar ni investigar. Eso es cosa de los partidos y los políticos. O quizás de la prensa, en otros sitios lo hacen. Pero cuando estas cosas han empezado a oler así, siempre han terminado mal. Para los corruptos y para el pueblo. Si sabremos nostros de eso....

En fin, Zapatero a tus zapatos. Perdón, zapatero, con minúscula.