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Una ciudad crece cuando sus ciudadanos lo hacen. Y para ello es necesaria la comunicación, la participación, la implicación. La atonía que desde hace algunos años atraviesa esta Ciudad (O mejor dicho, sus ciudadanos) hace que nosotros engordemos, en vez de crecer. Más naves, más viviendas, más calles, pero sin alma. Este blog pretende animar, no hay otro objetivo.

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Lugar: Alcalá de Guadaíra, Sevilla, Spain

miércoles, octubre 04, 2006

La policía local en Alcalá

Recientemente se ha aprobado una norma que impone determinadas obligaciones para los ciclomotores y quads, en un claro intento de acabar con aquellas conductas que no sólo causan molestias a los vecinos, sino que suponen un peligro para la seguridad en el tráfico y, por tanto, de los ciudadanos. Fundamentalmente, la obligación de que los ciclomotores pasen la revisión técnica obligatoria y los conductores de los quads usen el casco.
Ahora bien, estas normas, y todas las demas, se quedan en papel mojado si no hay una autoridad que exija su cumplimiento y sancione su incumplimiento. Y en estos momentos, la vigilancia y la sanción en las normas ya vigentes es nula. El ejemplo más claro, el uso de los cascos en los ciclomotores. ¿Tiene Alcalá una norma distinta que Dos Hermanas o Sevilla? Lo decimos porque en esas ciudades sí se exige el uso del casco, y aquí no. En Alcalá vemos como rara vez se usa el casco, se pasa por delante de una pareja de policías locales con toda impunidad, sin que se les vea ni siquiera llamarle la atención. Antes había, de forma discontinua, determinados controles, en días sueltos. Ahora, impunidad absoluta.
Hemos tratado de averiguar porqué esta dejación en el cumplimiento de la Ley por quien está obligado a su exigencia.
Nos dicen que despues de la gran movilización que hicieron por reivindicaciones laborales y profesionales al inicio de esta legislatura, el lamentable tiempo en que doña Guillermina fue Delegada de la Policía -afortunadamente corta-, se puso fin a mismo cediendo en buena parte de esas reivindicaciones a cambio de acabar con el predominio de CC.OO. y el lider Cuqui.
A cambio, se entró en una relajación absoluta de los servicios más incomodos, sin marcar más prioridades que la regulación del tráfico en los continuos atascos y poco más.
Por supuesto, los controles de ciclomotores, el control de alcoholemia y campañas similares ha dejado de hacerse.
Esta dejación nos parece de una tremenda gravedad por lo que supone de incumplimiento de la Ley y de dejación de los responsables políticos para asumir sus obligaciones.